El Tesoro Público ha recortado sus necesidades de financiación para este año en 5.000 millones de euros, debido a la «fortaleza» del crecimiento económico de España. Con esta medida, su programa de emisión neta de deuda se reduce de 60.000 millones previstos inicialmente a 55.000 millones, manteniendo así la misma cifra que el año 2024.
Según ha informado el Ministerio de Economía, este ajuste se debe principalmente al dinamismo de la actividad económica y, en especial, del mercado laboral, que ha alcanzado récords de afiliados. Esto ha llevado a menores necesidades de financiación, sumándose a la habitual prudencia en las estimaciones de la estrategia anual.
Asimismo, la reducción de la emisión neta de deuda anunciada causa que el programa de financiación de este año sea el mismo que en 2024, «incluso tras hacer frente a los gastos asociados a la DANA y al aumento de compromisos en materia de defensa».
Signos de buena gestión en la reducción de la deuda
El Departamento dirige por Carlos Cuerpo ha destacado que la disminución del objetivo de emisión neta de deuda en 2025 representa «una señal de buena gestión» y ayuda a reforzar el notable apetito inversor hacia las emisiones del Tesoro, manteniendo contenidos el coste y la carga financiera.
Un dato significativo es que la ratio de cobertura en las colocaciones de medio y largo plazo ha alcanzado las 3,95 veces por encima de la deuda emitida, lo que supone el nivel más alto en la historia del Tesoro.
Adicionalmente, el Gobierno ha señalado que las recientes revisiones al alza de las calificaciones de la deuda por parte de las tres principales agencias internacionales (Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch) han brindado un nuevo impulso al apetito inversor. La caída de la prima de riesgo a mínimos no vistos desde antes de la crisis financiera, alrededor de 55 puntos básicos, también es una señal positiva.
En este contexto, el Ministerio de Economía ha subrayado el creciente peso de los inversores no residentes, quienes desde 2022 han aumentado en más de 180.000 millones de euros su posición en deuda española a medio y largo plazo. Actualmente, representan el 47% del total, comparado con el 40% en 2022.
El coste medio de la deuda en circulación se sitúa en el 2,28%
El Tesoro Público ha aprovechado los años de tipos de interés bajos para prolongar la vida media de su cartera, estableciéndola en alrededor de ocho años. Esto ha reducido notablemente el riesgo de refinanciación y ha suavizado el impacto de las subidas de tipos de interés sobre el coste de la Deuda.
En la actualidad, el coste medio de la deuda en circulación se sitúa en el 2,28%, lo que representa un incremento de solo 64 puntos básicos desde su mínimo histórico de 1,64% en 2021. Este aumento es apenas un cuarto de los 250 puntos básicos acumulados en los tipos de interés oficiales durante el mismo período.
Por otro lado, el coste medio de emisión se ha reducido en los últimos meses, acercándose al coste medio de la deuda en circulación. Hasta agosto de 2025, el coste medio de emisión se sitúa en el 2,75%, por debajo del 3,16% del año pasado.
En consecuencia, la carga financiera de la deuda del Estado en relación con el PIB se mantiene contenida, alrededor del 2%, cerca de su mínimo del 1,88% en 2021, y distante del máximo del 2,92% registrado en 2014.
